lunes, 30 de marzo de 2009

ENTRE LAS DOS ORILLAS


Artículo publicado en “Periferia Libros”,
cuaderno de cultura del diario La Opinión de Granada.
Edición sábado 5 de abril de 2008.
Entre las 2 orillas: literatura marroquí en lengua española
Edición de Carmelo Pérez Beltrán.
Editorial Universidad de Granada,
2007264 pp.15 €
José Cruz Cabrerizo.
-En el tema de la escritura marroquí en español, hasta donde uno puede otear el horizonte descubre no dos, sino tres orillas:La primera es la de los que niegan que haya una literatura marroquí escrita en español (e incluso en francés) porque no existe un enraizamiento en esa tierra de dichas literaturas, tampoco historia, tradición, y les niega cualquier posibilidad de futuro por su interés neocolonial, y la falta de lectores en un país en que la principal preocupación es el día a día. El lector interesado debería ver Dris Jebrouni, “La falacia de la literatura marroquí en castellano”, Marruecos digital del 21 de septiembre de 2006 (previamente aparecido en el diario en español de Casablanca “La Mañana”, marzo de 1997), que se centra en analizar “La antología de la literatura marroquí en castellano” de la Editorial Magalia, del año 1995.La segunda es la de la historiadora Mª Rosa de Madariaga. También en Marruecos Digital se puede ver “¿Existe una élite hispanohablante en Marruecos?”. Desdice lo escrito por Jebrouni para señalarnos que gracias a las políticas del colonialismo y del postcolonialismo francés sí hay élites francófonas en Marruecos que han resultado en una muy buena nómina de escritores marroquíes en francés. España ha hecho lo contrario de Francia y por eso los escritores marroquíes que se expresan en español “lo hacen en un español “para andar por casa”, como se dice vulgarmente, pero cometen en la lengua escrita faltas garrafales, no ya sólo en la construcción sintáctica, sino incluso en la ortografía. Se trata de un español aprendido “en la calle”, y no en la escuela desde la primaria”. Al menos no esconde su esperanza en el futuro: la verdadera generación de escritores marroquíes en español vendrá de la mano de los inmigrantes que lleguen a España.La tercera orilla es la de los propios escritores marroquíes en español. Otra vez en Marruecos Digital, Mohamed Lahchiri hace oír su voz en “Sobre literatura marroquí en castellano”. Un discurso que clama contra los excesos de Mª Rosa de Madariaga, pero que admite (como no podía ser de otra forma) que hay escritores mejores y peores, y que muchos de los peores (como no podía ser de otra forma) han sido encumbrados por la oficialidad cultural.Pero dejemos al lector que se forme una opinión. Y para ello lo primero es no saltarse el interesante prólogo de Carmelo Pérez Beltrán y el estudio introductorio y divulgativo de Abdellatif Limami.Y dejando atrás esas disquisiciones cruzadas cabe preguntarse si podría servirnos la lengua y su derivado escrito, la literatura, para tender puentes entre, no las tres, sino las dos orillas separadas por el Estrecho, superar esos prejuicios y estereotipos de los que habla el prologuista y editor literario. No cabe duda que los escritores marroquíes en español, de calidad o pésimos, contenidos en esta o en otras antologías o no recogidos en ninguna, mantienen una relación sentimental, aman nuestra lengua común y ven en ella una herramienta para el entendimiento de dos vecinos tan cercanos y tan lejanos. Haríamos bien en adoptar lo que propone Mohamed Lemrini El Ouahhabi: “No nos faltan ganas de expresarnos en este idioma y eso, para muchos de nosotros es un gran esfuerzo que alguien tiene que valorar muy positivamente”.“Entre las dos orillas: literatura marroquí en lengua española”, recoge la nómina de autores que vamos a citar completa sin que importe su mayor o menor visibilidad literaria: se trata de Mohamed Chakor, Mohamed Bouisef-Rekab, Mohamed Akalay, Mohamed Lahchiri, Rachida Gharrafi, Ahmed Oubali, Ahmed Mohamed Mgara, Larbi El Harti, y (algo que no se comprende muy bien en un libro de relatos) un poeta en calidad de tal: Adbedarrahman El Fathi.Una ventaja estratégica muy importante de este volumen es que se incluyen tres referencias de cada uno de los nueve autores. Estamos acostumbrados a antologías de un solo relato por persona y eso a veces hace perder perspectiva, por cuanto el escritor se la juega a una sola carta. De entre todos los títulos que contiene esta edición, hay autores de los que sólo les salvaría un relato (ténganse en cuenta los parámetros personales y subjetivos de esta afirmación). En mi caso habrían resultado escritores “deficientes” si no me hubiera topado con el relato “perfecto”.El tema de la inmigración es transversal a un gran parte de las narraciones . “Las dos orillas” de Mohamed Chakor es un sencillo y bien conseguido cuento “antropológico” en que una orilla reprocha a la otra el haberse olvidado de su pasado. La inmigración es factor determinante en la vida de muchos de los personajes: mujeres que cruzan el Estrecho con éxito y son pasto de la explotación sexual de sus propios compatriotas (valiente y digno de destacar, no toda la culpa es de los otros, “Promesas”, de Mohamed Akalay con un bien construido monólogo interior). También sufren su triple condición de mujeres, pobres, e inmigrantes las protagonistas de “El sacrificio de los corderos” de Rachida Gharrafi, desgraciadamente la única escritora recogida y uno de mis descubrimientos más gustosos. Hombres que mueren en el intento y que tienen que seguir viviendo en forma de cartas que engañen al hijo que dejaron en Marruecos (“Cartas al Estrecho”, de Rachida Gharrafi, de una exquisita sensibilidad, que no sensiblería lacrimógena). No falta algún relato negro, “Chivos expiatorios” de Ahmed Oubali, que cojea un poco en el léxico, es como si hubiera tenido que recurrir a traducir diccionario en mano, las palabras son poco apropiadas al entorno, pero la trama es inmejorable y muy bien conseguida y suple la deficiencia anterior (entiéndase que esto no se extiende a todo el relato, sino que salpica nueve o diez oraciones en un relato de nada menos que doce páginas). Relatos que nos arrancan una sonrisa con gracia inteligente (“Encuentros en el Feddan”, de Ahmed Mohamed Mgara). También la miseria queda bien retratada (muy gustoso leer “Precoces” Mohamed Bouiseff Rekab con su “Candidez oculta” o el espejismo de un paraíso que nubla las conciencias de muchos marroquíes. Larbi El Harti (“El rumor al poder”) es uno de los que demuestran más dominio de la lengua, en el Marruecos profundo y traza una historia entretenida sobre las exageraciones que provoca la rumorología. Junto con este último destacar por su desparpajo y oralidad, por la capacidad de suscitar la pregunta de si la historia se basará o no en la experiencia personal, a Mohamed Lahchiri, que presenta tres cuentos extraídos de su libro “Una tumbita en Sidi Embarek y otros relatos ceutíes”. Citaré “Moras pisoteadas”, que apunta con el dedo a los de dentro, los malos no solo son los países extranjeros.Lahchiri nos sirve para ejemplificar las exageraciones y generalizaciones en torno a la escritura marroquí en español. Autor de calidad contrastada, se han llegado a decir cosas peregrinas (me figuro que por extensión también de otros autores), como que sus relatos son populistas y de un costumbrismo que bien aprovechado provoca la nostalgia entre los ceutíes. Quien quiera puede pedir mi partida literal de nacimiento para comprobar que no nací en Ceuta, pero sus cuentos de “Una tumbita en Sidi Embarek y otros relatos ceutíes”, me produjeron el íntimo placer de enfrentarme a historias con corazón, con vidas que fluyen, con sentimientos, tal como muchas de las creaciones de “Entre las dos orillas…”Estoy seguro de que los relatos que no han sido de mi agrado pueden ser plato de gusto para cualquier otro lector, y que de cada autor hallarán al menos un ejemplo que les guste. Mi agradecimiento a estos constructores de puentes que enfrentan tantas dificultades como “Los constructores de puentes” de Ripley.

domingo, 22 de marzo de 2009

Estimados amigos del CMMC:

Sobre la "memoria histórica común"
El encuentro sobre la llamada "memoria histórica común", que pretendía dilucidar el papel de los soldados marroquíes que participaron en la guerra civil española, y que se ha celebrado recientemente en Tetuán, ha estado cargado de polémica.
La cuestión fundamental que no se ha abordado es la propia definición y contenidos de esta iniciativa. Acogiéndose a la iniciativa auspiciada por la Ley de Memoria Histórica en España, se pretende aclarar responsabilidades en el aporte de soldados marroquíes a la guerra civil española. La llamada "memoria histórica común" parece haber aprovechado de manera precipitada la circunstancia histórica en España que se ha generado con la ley de Memoria Histórica.Y esto sin la necesaria tarea de reflexión y estudio que debe conllevar tal iniciativa.Resulta difícil establecer las circunstancias de dichos hechos, a falta de una rigurosa investigación académica, como parece no existir, y de la inexistencia de datos fiables, más allá de los manejados por los organizadores del evento.La historia entre España y Marruecos debe ser abordada con el rigor y la seriedad adecuadas, sin oportunismos y sin el habitual debate "en caliente" que en demasiadas ocasiones caracteriza la reflexión sobre los asuntos comunes. No parece que esta iniciativa se haya encaminado en ese sentido.(03/03/09)



Estimados amigos del CMMC:
Os agradecemos vuestra invitación al Seminario internacional sobre la participación de los marroquíes en la guerra civil española, que se celebrará en Tetuán de finales de febrero al 1 de marzo de 2009. Leído atentamente el texto de la Plataforma de dicho encuentro, nos parece que los plantamientos que contiene mezclan cuestiones diferentes, que se prestan a confusión:

1) En lo que respecta a la Ley de la Memoria Histórica y el auto del juez Garzón, ambos se refieren a las reclamaciones de los familiares de las víctimas de la guerra civil y de la represión franquista, a las que se trata de localizar y posteriormente identificar, entendiendo por víctimas a las personas que fueron asesinadas y arrojadas a fosas comunes, y no a los soldados, ya fueran españoles o marroquíes, que murieron en el frente en acción de guerra. Por ello, ni la Ley de la Memoria Histórica ni el auto del juez Garzón se aplican a los marroquíes, que eran soldados muertos en el campo de batalla, pero no asesinados. Lo que no excluye que hubiera algún caso que, de conocerse, habría que amparar.

2) Para avanzar cifras sobre el número de marroquíes que participaron en la guerra civil , hay que basarse en fuentes fiables y contrastarlas. Los historiadores que hasta ahora han trastado el tema sobre la base de investigaciones serias, sitúan la cifra en torno a los 80.000 más o menos.

3) Para afirmar que unos 9.000 de los marroquíes reclutados eran menores de 12 años, hay que basarse en fuentes fiables y no en lo que se cuenta de oídas. En ningún documento de archivo aparece ese dato. Pudieron darse algunos casos de jóvenes reclutas que, para poder alistarse, declararon ellos o sus familias ser mayores de lo que en realidad eran (declarar, por ejemplo, tener dieciocho años y no tener más de dieciséis), pero de ahí a dar por buena la información de 9.000 reclutas menores de 12 años hay mucha diferencia.

4) Hay que tener cuidado con no reunir datos o informaciones únicamente sobre la base de testimonios orales. Las entrevistas sobre el terreno pueden ser interesantes y útiles en cuanto a elementos subjetivos (lo que pensaban o sentían los soldados de aquella guerra, etc.), pero, para los datos objetivos, la memoria puede jugarnos muy malas pasadas, sobre todo cuando esa memoria es en general de "segunda mano" porque los protagonistas ya se han muerto y son los hijos o los nietos los que cuentan las cosas. Lo que se conoce como "historia oral" puede ser un elemento importante para reconstruir el pasado, pero los datos tienen que ser contrastados con fuentes de archivo. No son fiables si carecen de base documental en que apoyarse.

5) En lo que respecta a violaciones de los derechos humanos en la zona jalifiana durante la era franquista, sin duda las hubo lo mismo que las hubo en España. Esa zona estaba sometida a un régimen colonial y, además, militar. Hay que decir que eran los caídes, en general fieles servidores de la autoridad militar, los encargados de los reclutamientos masivos en sus cabilas y de mantener firmemente controlados a los cabileños. La represión en la zona jalifiana se ejerció fundamentalmente contra la población española de izquierdas: comunistas, socialistas, anarquistas, o sencillamente republicanos. También hubo represión contra los masones, algunos de ellos de origen judío, aunque de nacionalidad española, que fueron apresados en Melilla y llevados al campo de concentración de Zeluán, de donde muchos de ellos fueron sacados para ser fusilados. En cuanto a los musulmanes de la zona, que eran, naturalmente, la mayoría de la población, éstos se libraron, por orden de la autoridad militar, de la represión franquista. Franco que estaba entonces reclutando a miles de marroquíes para su ejército tenía particular interés en ser considerado como el "amigo del Islam" (Sobre la represión en la zona Norte, véase: Vicente Moga Romero, Las heridas de la historia. Testimonios de la guerra civil en Melilla, y Francisco Sánchez Montoya, Ceuta y el Norte de África. República, guerra y represión, 1931-1944).

En vista de lo que precede, pensamos que:

1) No sólo no debemos ignorar nuestra historia común, sino que, por el contrario, debemos conocerla mejor y asumirla sin prejuicios. Pero ello debe hacerse sobre la base de investigaciones científicas sólidamente fundamentadas en fuentes fiables, y no de elucubraciones o informaciones fantasiosas carentes de todo rigor histórico. En este orden de ideas, hay que evitar la instrumentalización de la historia que lleva a tergiversarla o incluso reinventarla, con el objeto de acomodarla, según convenga, a intereses ajenos a la verdad histórica.

2) Creemos que antes de proceder a organizar congresos o seminarios como el propuesto, sería conveniente efectuar investigaciones de primera mano en los archivos españoles. En este sentido, habría que fomentar en los departamentos de historia de las universidades marroquíes la preparación de memorias de licenciatura o de tesis de doctorado sobre el periodo del Protectorado, solicitando con este fin becas de estudios, ya sea al gobierno marroquí o al gobierno español, para estancias en España que permitan la consulta de los archivos con documentación sobre Marruecos. Los historiadores españoles estarían, a no dudarlo, encantados de poder ayudar en todo lo que fuera posible a los historiadores o investigadores marroquíes interesados por ese periodo de nuestra historia común.


Con un cordial saludo.

María Rosa de Madariaga y Bernabé López García





domingo, 15 de marzo de 2009

Polémica en torno a la celebración de un congreso sobre la "memoria histórica común"


Polémica en torno a la celebración

de un congreso sobre la "memoria histórica común"
La celebración de un Congreso sobre la llamada "memoria histórica común" en Tetuán hace unos días ha estado salpicada por una importante polémica sobre sus contenidos, su rigor y sus participantes. Algunos de ellos se han pronunciado con claridad sobre el evento.
5 de marzo de 2009-. El encuentro, organizado por el llamado "Centro para la Memoria Común y el porvenir", que se define como "una asociación que se dedica específicamente a trabajar sobre aquellas cuestiones relacionadas con la memoria común de los marroquíes y las componentes de su entorno geográfico y político en su dimensión política, de derechos humanos y de desarrollo" , se celebró los días 27-28 de Febrero y 1 de marzo de 2009 en la ciudad de Tetuán, sobre el tema “la cuestión de la memoria común entre el análisis jurídico-judicial, y el análisis polico-derechos humanos, la participacion de los Marroquíes en la Guerra Civil como ejemplo”. La iniciativa parece aprovechar el momento histórico en España, tras la aprobación de la Ley de Memoria Histórica, que pretende recuperar los restos de muchos fallecidos del bando republicano en la guerra que fueron asesinados y abandonados en fosas, y dignificar su recuerdo. Aunque la polémica también ha acompañado en España la aplicación de dicha ley, pues se aprobó sin el acuerdo de la oposición al gobierno. En la iniciativa judicial para abrir las fosas ha tenido un papel destacado el juez Baltasar Garzón.Algunos participantes marroquíes, como el conocido escritor tetuaní Ahmed Mgara, denunciaron "la desorganización y la desinformación generales" que acompañaron a la celebración del evento y las "ausencias notorias de muchas y muchos nombres de peso" en dicho congreso. Manifiesta igualmente, sobre la intervención de soldados marroquíes en la guerra civil española, que "la participación mora se ha quedado sepultada en un baúl al que tan solo se recurría para resaltar los horrores" y que es necesario "deshacer el mito de que esos marroquíes estuvieron por reclutamiento forzoso,(...) cambiar la imagen de “fascista” del soldado marroquí que participó en la guerra con Franco y la de “comunista” del que participó en el bando republicano, recuperar los cementerios y dignificarlos, verificar hasta qué punto fueron ciertas las versiones que indicaban que muchos participantes marroquíes de la zona rifeña lo hicieron por instrucciones del Jalifa del rey desde Tetuán, (...), constatar hasta que punto puede ser cierto lo de alistar a combatientes que ya poseían experiencia y antecedentes con los cabecillas de algunas cábilas como los participantes en la Batalla de Annual, y censar los fallecidos en los frentes (...)" La polémica sobre los contenidos a tratar en el encuentro se avivó ante la declinación de la invitación hecha por algunos de los hipotéticos participantes, como la historiadora María Rosa de Madariaga o el profesor Bernabé López, que enviaron un comunicado a los organizadores del evento, en el que afirmaban que "en lo que respecta a la Ley de la Memoria Histórica y el auto del juez Garzón, ambos se refieren a las reclamaciones de los familiares de las víctimas de la guerra civil y de la represión franquista, a las que se trata de localizar y posteriormente identificar, entendiendo por víctimas a las personas que fueron asesinadas y arrojadas a fosas comunes, y no a los soldados, ya fueran españoles o marroquíes, que murieron en el frente en acción de guerra. Por ello, ni la Ley de la Memoria Histórica ni el auto del juez Garzón se aplican a los marroquíes, que eran soldados muertos en el campo de batalla, pero no asesinados. (...)", y que "para avanzar cifras sobre el número de marroquíes que participaron en la guerra civil , hay que basarse en fuentes fiables y contrastarlas. Los historiadores que hasta ahora han tratado el tema sobre la base de investigaciones serias, sitúan la cifra en torno a los 80.000 más o menos". También discutían en dicho comunicado la participación de menores en el conflicto armado, manifestando que " para afirmar que unos 9.000 de los marroquíes reclutados eran menores de 12 años, hay que basarse en fuentes fiables y no en lo que se cuenta de oídas. En ningún documento de archivo aparece ese dato. Pudieron darse algunos casos de jóvenes reclutas que, para poder alistarse, declararon ellos o sus familias ser mayores de lo que en realidad eran (declarar, por ejemplo, tener dieciocho años y no tener más de dieciséis), pero de ahí a dar por buena la información de 9.000 reclutas menores de 12 años hay mucha diferencia". Por último, insisten en que " hay que tener cuidado con no reunir datos o informaciones únicamente sobre la base de testimonios orales. Las entrevistas sobre el terreno pueden ser interesantes y útiles en cuanto a elementos subjetivos (lo que pensaban o sentían los soldados de aquella guerra, etc.), pero, para los datos objetivos, la memoria puede jugarnos muy malas pasadas, sobre todo cuando esa memoria es en general de "segunda mano" porque los protagonistas ya se han muerto y son los hijos o los nietos los que cuentan las cosas. Lo que se conoce como "historia oral" puede ser un elemento importante para reconstruir el pasado, pero los datos tienen que ser contrastados con fuentes de archivo. No son fiables si carecen de base documental en que apoyarse".En lo que respecta a violaciones de los derechos humanos en la zona jalifiana durante la era franquista, manifestan que "sin duda las hubo lo mismo que las hubo en España. Esa zona estaba sometida a un régimen colonial y, además, militar. Hay que decir que eran los caídes, en general fieles servidores de la autoridad militar, los encargados de los reclutamientos masivos en sus cabilas y de mantener firmemente controlados a los cabileños.(...) En cuanto a los musulmanes de la zona, que eran, naturalmente, la mayoría de la población, éstos se libraron, por orden de la autoridad militar, de la represión franquista. Franco que estaba entonces reclutando a miles de marroquíes para su ejército tenía particular interés en ser considerado como el "amigo del Islam" ".Como conclusión, afirman en el comunicado que "no sólo no debemos ignorar nuestra historia común, sino que, por el contrario, debemos conocerla mejor y asumirla sin prejuicios. Pero ello debe hacerse sobre la base de investigaciones científicas sólidamente fundamentadas en fuentes fiables, y no de elucubraciones o informaciones fantasiosas carentes de todo rigor histórico. En este orden de ideas, hay que evitar la instrumentalización de la historia que lleva a tergiversarla o incluso reinventarla, con el objeto de acomodarla, según convenga, a intereses ajenos a la verdad histórica", y terminan por afirmar que "creemos que antes de proceder a organizar congresos o seminarios como el propuesto, sería conveniente efectuar investigaciones de primera mano en los archivos españoles(...)"A tenor de los resultados, parece que este primer evento se ha saldado con el desencuentro. La moraleja que del mismo se pudiera extraer es que hay que trabajar mucho más en investigación y fiabilidad antes de plantear responsabilidades de uno u otro tipo. Por otra parte, resulta dudoso, visto el planteamiento precipitado del encuentro, que con sus conclusiones fuera a contribuir al entendimiento hispano-marroquí, que necesita, precisamente, de reflexión y sentido de la responsabilidad.

SEMINARIO PARTICIPACIÓN MARROQUIES EN LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

SEMINARIO PARTICIPACIÓN MARROQUIES EN LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA


Todas las experiencias democráticas, y en especial la española, han demostrado que es imposible cerrar de una vez para siempre las paginas de las violaciones de los derechos humanos cometidas durante el periodo “ante-democrático”, sin tratar esas violaciones así como los crímenes cometidos durante este periodo. La historia ha demostrado con creces, que los estigmas que han dejado estos crímenes endeudan el futuro de la democracia y relativizan su dinámica histórica.

Sin embargo, si el procedimiento es complejo en si, cuando se trata de violaciones y crímenes cometidos en un mismo país, es mas difícil de convivir cuando se trata de conflictos que implican otros países u otras poblaciones, en este caso se requiere una acción multidimensional que implique a diverso actores e interlocutores sobre todo políticos.

Las acciones que se pueden emprender en este sentido, deben de tener como objetivos primordiales, establecer un diagnostico transparente que permita ver y reconocer las relaciones entre los actores y favorecer la vía de la democracia. Para tal fin se necesita la movilización selectiva de los diferentes elementos y actores que puedan influir de manera eficaz, (historiadores, juristas, sociólogos, politólogos, sociedad civil, ONG), para un estudio pluridisciplinario que garantice la sinergia y permita la actualización de “ la Memoria Histórica ” sin la cual toda construcción compartida de la verdad, puede ser objeto de contradicciones y rechazo. Por ello la reconciliación, no debe de ser una tentativa que se deje en el infinito.

Dentro de este contexto y teniendo en cuenta las conclusiones y las recomendaciones del 1er seminario del CMCA y el debate que se ha creado en España entorno a las violaciones graves de los derechos humanos durante la guerra civil Española, y en Marruecos bajo el protectorado de Franco en “la zona Kahlifial”.

El CMCA organiza un seminario internacional sobre la cuestión de la “Memoria Histórica» común de este periodo. Este seminario interviene en el marco de las acciones emprendidas por el CMCA, y de las que ha desprendido las cartas enviadas al Primer Ministro Marroquí, a su homólogo Español, al juez Don Baltasar Garzón y a las Asociaciones de la Memoria Histórica , así como la conferencia de prensa organizada por el CMCA, en la que se presento el programa de esta acción, sin olvidar la jornada de estudio de Alhucemas, estos encuentros han constituido el anuncio de la apertura del expediente de la “ Memoria común hispano-Marroquí”.

Por consiguiente se tarta de revisar los archivos para llevarlos a la luz, y determinar el paradero de las victimas, que según algunos documentos fidedignos cifran en miles los Marroquíes que fueron reclutados y enviados a luchar en el frente de la guerra civil, y de los cuales muchos eran menores de 12 años. Por otra parte los militantes de la derecha, francmasónico, etc. Este trabajo debe ser abordado de una manera lógica y fuera de cualquier polémica, dada la gravedad de los hechos y el grado de las atrocidades cometidas por el estado Español contra la población de la zona ocupada que estaba bajo el protectorado español por aquel entonces, determinado en el marco del tratado del protectorado. Estas violaciones masivas no pueden escapar a la justicia y ser objeto de prescripción.

Cabe de señalar que esta iniciativa procura rehabilitar una amplia capa de la sociedad marroquí y aspira a corregir parte de la historia común entre Marruecos y España, a raíz de los prejuicios y los tópico que se difunden en algunos ámbitos que no tienen interés en construir una relación hispano marroquí fundada en la competencia, en el trato semejante, en la construcción de unas naciones democráticas que merecen sus respectivos pueblos.

A través del seminario, el CMCA, pretende establecer como objetivo, y basándose en el principio de justicia transnacional, el reflexionar sobre las vías adecuadas para hacer justicia a la memoria de las victimas e intentar construir una relación basada en las buenas practicas democráticas para los dos países vecinos que como la historia ha demostrado estas condenados a entenderse.

Tetuán : 26- 28 de febrero y 01 marzo 2009

PROGRAMA

VIERNES 27 DE FEBRERO 2009

17H30-20H00: Acto de Apertura

Presidente: Abdessamad Benchrif
Relator: Mustapha Mrizak

Alocución de Bienvenida
Proyección y debate de la película « los perdedores » de Driss Deaback

SÁBADO 28 DE FEBRERO 2009

09H00-10H00 : 1a Sesión: Introducción a la comprensión de la Guerra Civil Española
Presidente: Dr. Mohammad Néchneche
Relator: Pr. Abdelatif Chahboun

Pr. Jordi Canal (Historiador)
Pr. Marije Hristov (Historiador))

10H00-13H00 : 2a Sesión: La participación marroquí en la Guerra civil Española.

Presidente: Pr. Rafael Guerrero Moreno
Relator: Pr. M’hammed El moutawakkil
Pr. Azouz Hakim (Historiador)
Pr. Francisco Sánchez Montoya (Historiador)
Pr. Moustapha El Merroun (Historiador)
Pr. Víctor Morales Lezcano (Historiador)
Pr. Abdelmajid Benjelloun (Historiador)
Pr. Juan Pando (Historiador)
Pr. Bouhaddi Boubaker (Historiador)
Pr.Bougalab Al Attar (Historiador)
Pr. Ahmed Mohamed Mgara (Archivero)
Pr. José Luis navazo( Ecrivain- journaliste)
Pr. Driss Jebrouni (Ensayista)

15H00-17H45 : 3a Sesión: Que enfoque para a abordar la participación Marroquí en la Guerra civil Española. ?

Presidenta: Pr. Beatriz Rueda Molina
Relator: Pr. Abdesslam Seddiki

Intervención introductiva: Pr. Abdesslam Boutayeb Presidente del CMCA

El enfoque jurídico - judicial y político

Pr. Javier Chinchón (Jurista)
Pr. Rafael Escudero Alday (Jurista)
Pr. Youssef El Bouhayrri (Jurista)
Pr. Hakim Benchemache (Jurista)
Pr. José Antonio Martín Pallín (Magistrado)
Pr. Abdelhay Mouadden (Jurista)
Pr. Paco Etxeberria (Antropólogo)
Pr. Mohamed Ayad (Actor político)
Pr. M’hammed GRINE (Actor político)
Pr. Mohammed Aujjar (Actor político)
Pr. Jamal Agmani (Actor político)

17H45-20H45 : El enfoque de los derechos humanos

Presidente: Pr. Anas Bensalah
Relator: Pr. M’hammed El moutawakkil
Pr. Santiago Macías (ARMH - España)
Pr. Mohammed Soual (CCDH – Marruecos)
Pr. Gonzalo Acosta Bono(Todos los Nombre - España)
Pr. Amina Bouayach( OMDH – Marruecos)
Pr. Paqui Maqueda (Asociación Memoria Histórica y Justicia de Andalucía - España)
Pr. Mohammed ESSABAR (FMJV – Marruecos)
Pr. Joaquin Herrera Flores (Fundación Iberoamericana des derechos humanos - España)
Pr. Omar Lamaalam (Dakirat Arrif – Marruecos)
Pr. Juan Pando (Historiador- España)
Pr. Mohamed Noury (groupo de investigadores sobre la Paz )
Pr. Julie Guillerot (International Center for Transitional Justice -Europa)

Domingo 1 de marzo 2009

10H00-13H00 : Sesión de Clausura: Presentación del informe de síntesis, debate et recomendaciones.
Presidente: Pr. Mohamed Ayad
Relator: Pr. Noureddine Harami
Presentación del informe de síntesis por el Pr Abdelfattah Ezzine

Comentarios de los peritos :
Pr. Moussaoui el Ajlaoui – Pr. Habib Belkouche - Pr. Abdeltif Menouni
Pr. Pr. José Antonio Martín Pallín – Pr. Santiago Macías – Pr. Jordi canal
Debate general
Presentación y adopción de las recomendaciones: Pr.Abdel-Ali Mastour

jueves, 12 de marzo de 2009

Codenaf impulsa la segunda edición de la campaña para la captación de voluntarios


ALMERÍA

Codenaf impulsa la segunda edición

de la campaña para la captación de voluntarios

12.03.09 Durante el acto hubo té y pastas. /IDEAL

Durante el acto hubo té y pastas. /IDEAL
El objetivo de la segunda campaña de 'Fomento del Voluntariado para oenegés de Inmigrantes' está claro. «Buscamos la captación de voluntarios para que colaboren en las organizaciones de inmigrantes dando clases de apoyo escolar, para realizar acompañamientos, orientación laboral y un sinfín de actividades que beneficien al colectivo de inmigrantes», explicó el presidente de la Asociación Cooperación y desarrollo con el Norte de África (Codenaf) en Almería.
Bentrika apuntó que no solo buscan la cooperación de almerienses, también quieren implicar a los propios inmigrantes para que colaboren con asociaciones de la provincia. «Se trata de enriquecernos mutuamente», añadió el presidente en Almería de Codenaf quien concretó que «según un estudio cada euro que se 'invierte' en un voluntario éste devuelve simbólicamente siete euros por lo tanto es muy importante la labor del voluntariado».
La campaña cuenta con el apoyo de la Agencia Andaluza del Voluntariado de
la Junta de Andalucía. En la presentación de la segunda edición estuvo presente la coordinadora provincial, Teresa Usero quien mostró su poyo a Codenaf para la realización de la campaña. El acto de presentación finalizó con un té y pastas para los asistentes.